lunes, 16 de abril de 2012

Rincones para perderse: la ultima de almendros... Por este año

 

El Valle escondido de los Almendros


Siempre bajo la mirada de Moncayo, aunque se oculte tras las nubes o parezca lejano, mohíno, indiferente detrás de la neblina invernal o la calima veraniega. Siempre al abrigo del cierzo, al sur de la Sierra de Yerga. Y siempre delicioso, equilibrado, estoico, preparado para ofrecerte un tiempo en el que tu te vas a sentir acogido en el paisaje, formando parte de él, busca ese momento, en todas las épocas del año lo puedes encontrar. 
No dudes, sube a lo alto de Peña Redonda dispuesto a perder el tiempo, y te aseguro que nunca burlarás mejor a este tirano que  diario nos dirige y marca nuestra agenda.

Acércate a buscar información al "Bar Matías" pues allí siempre encontrarás algún gravaleño dispuesto a la conversación. Pregúntales por este recóndito rincón riojabajeño con miles de almendros, seguro que te darán razón del paraje... Y seguro también que algún mayor, atento a la charla, te preguntara: ¿cagüen tus "ca",...pues que se te ha perdido por allí...? Habla con él, escúchale y aprenderás las historias olvidadas de este austero y olvidado territorio.












La primavera cautiva los sentidos, miles de almendros en flor te reciben con su traje festivo y comprenderás lo que es una obra de arte, la simbiosis entre la naturaleza ocupando su espacio y el trabajo del hombre por hacer productivo una parte del territorio, nos regalan paisajes como este, disfrútalo.



Subiendo a Peña Redonda encontramos varias corralizas abandonadas, los rebaños de ovejas y cabras eran frecuentes en otras épocas, hoy solo quedan las ruinas de estas construciones adaptadas al terreno y muy pocos rebaños.



En las madrugada del verano, cuando llegues a lo alto de Peña Redonda y antes de que te alcance el tórrido calor del día, cuando los esquivos habitantes de este paisaje se muestran más activos y visibles, el corzo, el tejón o el águila real, entre otros del amplio listado de especies que lo habitan,  seguirás pensando que estas contemplando una maravillosa obra de arte, que tú formas parte de ella y además no tendrás que pagar por  disfrutarlo.